¿En que consiste la musicoterapia?
-La musicoterapia es una herramienta que nos ayuda a conectar con nuestro cuerpo, con la escucha, con la acción y recepción de sonidos y vibraciones con el fin de estimular habilidades y poder así estar más en contacto con ellas y desarrollarnos, a través de la práctica, cada vez un poco más en esas áreas en las que deseamos evolucionar.
Hay musicoterapia activa y musicoterapia receptiva.
La musicoterapia activa, donde el trabajo está enfocado en la búsqueda y ejecución de la música y la vibración. Las personas que trabajan desde aquí, experimentan con diferentes instrumentos para diferentes fines. Por ejemplo: la percusión ayuda a la psicomotricidad, a abrir el pecho, escucha, ritmo. Instrumentos de cuerda nos ayudan a encontrarnos con melodías, armonías, dulzura. Y así con otros instrumentos se van desarrollando diferentes habilidades.
La musicoterapia receptiva, que es la que nosotros ofrecemos, consiste en acompañar, a través de un viaje sonoro, a las personas que vienen a recibir.
¿En que va a consistir la sesión de Madrid?
-Las sesiones que ofrecemos son un viaje sonoro, donde aconsejamos a los participantes tumbarse cómodamente, relajarse y entregarse a una experiencia músico-vibracional, donde les acompañaremos por un viaje interior. Es una meditación guiada a través de los instrumentos y nos moveremos por espacios oníricos atemporales, por la tierra, por el cosmos, por el agua…
¿Que beneficios tiene?
-La vibración de los instrumentos nos ayudan a centrarnos en el presente, a ir un paso más allá de los pensamientos, relajando cuerpo y mente. A nivel celular, sobretodo con el gong, la armonización es muy evidente. Las personas que participan nos comentan como sienten que actúa en el cuerpo, aliviando tensiones, cambios de temperatura, mejora el insomnio, se desvanecen dolores de cabeza, evocación de recuerdos lejanos, resolución de problemas…
¿Que beneficios van a experimentar las personas que se acerquen?
-Venir a una de nuestras sesiones es regalarse dos horas en las que vamos, entre todos, a barrer todo aquello que nos impide conectar con lo sencillo que habita en nosotros, con la esencia interna. Es regalarse un viaje interior acompañado del grupo, compartiendo des de uno mismo un camino común. Es importante venir con una intención, con una motivación consciente para que así, el viaje, tenga un propósito personal y una dirección. Aunque no hay que buscar nada ni desear sentir nada. Sólo entregarse.
¿Cómo ha sido vuestro camino y como os habéis transformado a través de la música?
-Para nosotros, la música es una forma de vivir. No entendemos la vida sin ella. Los dos empezamos nuestro camino con ella a través de la música africana: ritmo, cantos, melodías. Poco a poco nos fuimos adentrando cada vez más en otros instrumentos que nos ayudaban a conectar de otra forma con estados meditativos y la musicoterapia nos permite compartir esos estados con otras personas que, como nosotros, buscan conectarse con la esencia más auténtica.
En nuestras sesiones, la parte que más nos gusta es el final, después de finalizar con la música, abrimos un círculo de palabra para que cada uno pueda compartir su experiencia, y nosotros también compartimos como lo hemos vivido.
¿Está pensado para todo el mundo aunque no haya tenido ningún contacto?
-Si, claro. Cualquier persona puede participar. A nuestras sesiones vienen desde niños hasta gente mayor. La única premisa es estar en silencio, conectar con el silencio interno para que la música pueda ir entrando y regalarnos su magia.
¿Que le dirías a alguien que se lo esta pensando?
-Le diría que no se lo piense más!!! jajaja. Estas dos horas de sesión son una oportunidad para vivir una experiencia profunda, una inmersión al mundo interior, un espacio-tiempo para salir de las actividades cotidianas y compartir con otros sensaciones nuevas y enriquecedoras. Al final, lo que nos queda en la vida, son estos momentos mágicos, así que lo mejor que podemos hacer es tener muchos de estos momentos para llevarnos de recuerdo.