Cualquier persona puede venir a la polarización dinámica.
Hay gente que acude todos los meses como una puesta apunto energética para el resto del mes.
Hay gente que quiere probar la polarización y prefiere hacerlo en pequeñas dosis.
Algunos lo hacen por vivir una experiencia diferente.
Otros tienen dificultades económicas pero quieren un masaje energético y aprovechan esta oportunidad.
A la salida solo 20 minutos más tarde solemos oír:
- Me voy flotando.
- Llevaba mucho tiempo sin poder llorar y lo he soltado todo, me voy nueva.
- Me noto con mucha más energía.
- Ojalá que me durase siempre este buen rollo.
- Noto como si el cuerpo estuviese más suelto, como si me hubiesen engrasado.
- ¿Puedo volver a pasar?